· La alcaldesa ensalza a la población como “un lugar mejor en el que vivir”
· Inauguración a caballo del pregón de Ángel Callejas y el concierto de Zubiri
Argamasilla de Calatrava vive ya intensamente sus celebraciones patronales de cada mes de septiembre en honor a la Virgen del Socorro, con una programación que ha adelantado este año su inicio en un día para que pueda concluir el domingo próximo en plenitud festiva. Anoche tenía lugar el protocolo inaugural y se compartía en el Parque ‘Huerta Asaura’ el primer gran evento musical, el recital de Serafín Zubiri junto a la Agrupación Musical rabanera bajo la batuta de Oscar Solís.
Una noche marcada al compás de los nombres propios habituales en la apertura del ciclo septembrino, que se fueron sucediendo sobre el escenario de un Centro Cultural en el que la virtuosísima interpretación de grandes piezas de la lírica universal a cargo de Manu Pilas, sirvió para emocionar sin remedio al numerosísimo público que se dio cita allí, una vez cortada la protocolaria cinta rojigualda.
Fue a puertas de la galería que conduce al interior del citado recinto, hasta donde llegaron caminando los escasos metros que lo separan de la Plaza del Ayuntamiento las diferentes autoridades y demás invitados presentes, entre otros la alcaldesa Jacinta Monroy, el pregonero Ángel Callejas o los representantes del Ejecutivo castellano-manchego Francisco Pérez y Francisco José García. La Agrupación Musical acompañó una vez más en este breve pasacalles que tuvo por colofón unos fuegos de artificio.
Intervención de Monroy
Ya dentro del recinto, la alcaldesa se dirigió a los presentes para recalcar durante su intervención que “Argamasilla de Calatrava cada día es un lugar mejor en el que vivir y estas fiestas son el momento perfecto para celebrarlo sin complejos, pero con la humildad de saber que todavía queda mucho por hacer y que siempre podemos seguir mejorando”.
Monroy Torrico tuvo palabras para “aquellos que volvéis en fiestas y que por circunstancias diversas no estáis con nosotros todo el año”; para “quienes sois vecinos de otras localidades y queréis compartir con nosotros nuestra alegría”; pero también, desde “mi más sincero agradecimiento y admiración, para las personas implicadas en que estos días todo salga según lo previsto”, con una especial alusión a la Hermandad de la Virgen del Socorro y a su presidenta, Isabel Rodríguez, “por la dedicación con la que preparan estas fiestas”.
La regidora destacó por otro lado realidades como la progresiva creación efectiva de empleo o las oportunidades laborales que el Ayuntamiento ha posibilitado durante la presente 
legislatura para más de 600 personas, así como la generación de hasta una docena de nuevas empresas en el suelo industrial durante los dos últimos años. Y apuntó los principales proyectos para los próximos meses, porque “en Argamasilla de Calatrava se puede desarrollar un proyecto de vida”.
Peñeros 2018
Se alcanzaría así y de la mano del magistral presentador del acto, Benjamín Hernández Caballero, la habitual vorágine de reconocimientos públicos. Los primeros recalaron en los Peñeros, que cada año encarnan el espíritu más vivo de estas celebraciones, el de sus gentes a través de sus 63 peñas. Este año Rocío Huertas Solís y José Miguel Arias Calvo, de ‘Los Coco Locos’, ejercen de Peñeros Mayores y Anabel Sánchez Barbarroja y Leonell Hangust Sotomayor Ramírez de Peñeros Infantiles.
Y justo después se entregaron los premios a los ganadores de los diferentes certámenes culturales convocados por el Ayuntamiento con motivo de estas Fiestas Patronales. En el caso de la poesía para la tercera edad correspondieron a Isidora Ruiz Gallego-Largo y Luis Molina Fernández. En poesía general, fueron para Laura Blanco González, Purificación Palomares Núñez y Miguel Ángel Fernández Núñez. En narración, Ataúlfo Solís Calle, José Cruz Ordóñez Sánchez y Cristina Peralta Merchán. En fotografía, Miguel Antonio García Carneros y María de los Ángeles Rodríguez Ruiz. En puntura, Patricia Cantador Gascón. Y, como autora del cartel anunciador, María Jesús Muñoz Muñoz.
Menciones a la Cultura y a la Solidaridad
En el turno de entrega de las menciones especiales que cada año se otorgan, el momento fue compartido por la alcaldesa Jacinta Monroy y los directores provinciales de Hacienda y Administraciones Públicas, Francisco Pérez y su homólogo de Sanidad, Francisco José García, quienes representaban en la noche inaugural a la Junta de Comunidades de Castilla-La 
Mancha.
Primero se otorgó la distinción cultural, que este año recaía en el virtuoso y precoz bailarían Iván López del Campo, que con cinco años empezó a dar muestras de su talento practicando aeróbic de competición en el gimnasio ‘El Zodiaco’. Y tras decantarse por el ballet clásico en la Escuela de Danza de Puertollano, a los nueve años de edad este joven y agradecido rabanero obtuvo beca para seguir formándose junto a prestigiosísimo Víctor Ullate, de lo cual sigue disfrutando desde hace ya seis años.
A continuación se daba paso a la primera de las dos menciones de honor a la Solidaridad 2018 entregadas este año. En este caso la de carácter personal, que fue recogida por Adela Jiménez Segura, que desde hace una treintena de años preside la Junta Local de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y cuyo máximo responsable provincial, Félix Peinado, acudió también invitado al acto. Finalmente era el turno para la Asociación de Viudas de Argamasilla de Calatrava (AVAC) que, por mediación de tres de sus integrantes, 
recibía la mención solidara en su modalidad para entidades.
El inagotable pregón del maestro Ángel Callejas Monescillo
Llegó así el momento culmen de la noche, el inagotable pregón que pronunciaba Ángel Callejas Monescillo en su regreso a la localidad donde ejerció de maestro entre 1960 y 1991, treinta y un años de relación y de vivencias en la población rabanera que, como bien dijo, iban a ser difíciles de condensar en la hora y cuarto que aproximadamente se prolongó su intervención.
En una profusa intervención, en la que intercaló guion, recuerdos, anécdotas y datos de lo más curioso, el veterano maestro, jubilado hace ya años, quiso glosar la idiosincrasia de la localidad que hasta ahora le ha seguido apreciando. Por eso, entre otras muchas cosas, citó los beneficios de la explosión económica de la vecina Puertollano o la llegada de los servicios ferroviarios de vía ancha y estrecha.
Una evolución en ciudadanía y también en diferentes tipos de viviendas a la que hay algo que, a su juicio, ha permanecido inalterable o, en su caso, se ha acrecentado: “el amor y devoción de este pueblo a su patrona, la Virgen del Socorro”, advocación de la que rabaneros y rabaneras esperan recibir “su protección y el modelo de vida y de virtudes de las que tan necesitados estamos hoy en día”, aseveró.
El pregonero ejerció sus dos primeros años de docencia en la población rabanera en el colegio hoy denominado ‘Rodríguez Marín’, pasando a completar el resto de su andadura en Argamasilla de Calatrava en el ‘Virgen del Socorro’. Por eso, al haber enseñado a tantísimas generaciones de rabaneros, muchos de ellos asistieron al pregón para saludar a quien fuera su maestro.