· El acto institucional estuvo cargado de nuevo de multitud de nombres propios y, entre ellos, el de Ramón Arroyo que ofreció una lección magistral de la vida
En una excepcional tarde de viernes que contó con la magistral y entusiasta lección acerca de la vida y la necesidad de superar con esfuerzo y convicciones cualquier obstáculo que se presente, ofrecida por el paratriatleta con esclerosis múltiple Ramón Arroyo, Argamasilla de Calatrava celebró ayer con gran repercusión el Día Internacional de las Ciudades Educadoras, condición de la que hace gala la población rabanera.
Una fecha señalada en el calendario de muchos países, de España y de la propia localidad, en cuyo Centro Cultural transcurrió el acto de reconocimiento a maestros ya veteranos, el alumnado que se esfuerza por aprovechar los recursos educativos a su disposición, a instituciones académicas y personas que profundizan en la enseñanza de conocimientos y a colectivos y empresas implicadas también con la causa educativa.
La cita estuvo presidida, junto a la alcaldesa Jacinta Monroy, por la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, quien en compañía de la subdelegada del Gobierno de Castilla-La Mancha en la provincia de Ciudad Real, Carmen Olmedo, se mostró gratamente sorprendida por el nivel y el significado de un evento en el que también actuó el virtuoso tenor Manu Pilas.
La regidora anfitriona, que esta misma semana recogía para la localidad el Sello UNICEF de Ciudad Amiga de la Infancia, recalcaba que la también condición de Ciudad Educadora supone sentar las bases para una mejor ciudad y, por eso, refrendó la apuesta que el propio Consistorio hace por la educación y la formación, en complicidad plena con centros y población.
Monroy Torrico agradecía, asimismo, al Consejo de Infancia y Juventud que hubiera hecho posible este día y poder seguir “la estela de estas personas que hoy [por ayer] reconocemos”, 23 en total, que para la alcaldesa suponen todo un ejemplo a seguir y un estímulo a la hora de seguir valorando los logros que la entrega por extender pautas educativas a todos los ámbitos sociales reporta a quienes son beneficiarios.
Distinciones 2018
Este año, las distinciones a los docentes que han cubierto ya sus carreras profesionales han sido para Josefina Nevado Romero, por su dedicación, labor educativa y formación en valores; Jesús Ruiz González; por su profesionalidad y vocación en la enseñanza de varias generaciones de rabaneros; Isabel Callejas Cano, por su cercanía, carisma y gran amor a la educación que trasmitía a su alumnado; Dolores Naranjo López, por análogos motivos; y Felipe Moraga Vacas, por su amor a la enseñanza y superación gracias a su constancia y tesón.
También para profesionales que, desde otros ámbitos, se preocupan por divulgar diferentes conocimientos entre la ciudadanía de Argamasilla de Calatrava. Como el doctor Javier Espinosa Arranz, jefe de Oncología del Hospital General Universitario de Ciudad Real, por su profesionalidad y excelencia en educación y formación oncológica continuada. Y, por una constante colaboración para hacer más segura la vida de los mayores rabaneros, fueron reconocidos Lorenzo Lobato García, oficial jefe de la Policía Local y José Vicente Donaire Fernández, sargento de la Guardia Civil.
Y si de Patricia Risco Monroy se valora su brillante trayectoria académica no solo escolar sino también universitaria, reconocida como alumna destacada por la UCLM, de las AMPAS de los Colegios ‘Virgen del Socorro’ y ‘Rodríguez Marín, se destacaba la implicación y dinamización de los respectivos centros escolares organizando actividades para la conciliación familiar. Y del IES ‘Alonso Quijano’ fueron distinguidas María Luisa Arias Aguilar, por su profesionalidad y competencia en su labor diaria y Agustina Sáez Ocaña, por su cariño y buen hacer en el trato con los estudiantes.
Asimismo, recibieron el homenaje rabanero la Asociación Amhida, por su trabajo constante por el aprendizaje y bienestar de menores en la localidad; Pan Carrión y la Cooperativa ‘Nuestra Señora del Socorro’, por el fomento de la alimentación saludable de los escolares; el párroco José Manuel Medina Porrero, por su entrega y motivación en la educación en valores religiosos; Julia Lozano Duque, por su vocación y profesionalidad y el fomento de valores; Loubna El Bouaichi, por su esfuerzo de superación en lo personal y en lo académico y su brillante trayectoria en el programa Estudia-Trabaja; y Juan Ramón Amores García, por su educación cívica, en el conocimiento sobre el ELA y su ejemplo de vida y superación.
Además, en las intervenciones iniciales en las que además de la alcaldesa intervino la propia consejera Patricia Franco, quien ensalzó el ejemplo de Argamasilla de Calatrava a la hora de poner en valor el gesto de la localidad a todos cuantos contribuyen a la transmisión de conocimientos, tomó también la palabra el director del Instituto de Educación Secundaria, Luis López Forján, en representación también de sus homólogas en los colegios.
Ramón Arroyo
Y quien dejó a todos los presentes admirados fue Ramón Arroyo, durante una intensa intervención que insufló su mismo espíritu de superación y esfuerzo que le impidió resignarse en su vida cotidiana cuando a este padre de familia le diagnosticaron esclerosis múltiple.
En una acertadísima y dinámica conferencia, durante la cual fue jalonando diferentes escenas de la película que refleja acertadísimamente sus vicisitudes personales [‘100 pasos’, basada a su vez en el libro autobiográfico ‘Rendirse no es una opción’, el ilustre invitado recalcó como la autoestima es la clave que impide rendirse cuando esas otras esclerosis múltiples de la vida atenazan la cotidianeidad de todas las personas.
Por lo demás, Ramón Arroyo se congratulaba de que actos como los organizados en la localidad rabanera son muy importantes y celebraba que “el Ayuntamiento de Argamasilla de Calatrava ha entendido que [refiriéndose a su caso] no es una historia de deportes, no es una historia de enfermedad, es una historia de familia, una historia de amor donde se cuenta la superación”.